Foto portada: Expresión corporal y gestual sentado
Breve análisis del interrogatorio de un asesinato que commocionó a Brasil. El episodio de violencia doméstica impactó a la nación suramericana y fue conocido gracias a que quedó registrado gracias a las cámaras de seguridad del edificio donde la pareja vivía y al juicio posterior.
En este análisis pericial se puede apreciar como el comportamiento kinésico contradice en varias ocasiones al lenguaje verbal del sujeto pasivo, el interrogado. Los sujetos activos son la jueza y los fiscales. Veremos como ambos, en especial un fiscal, pone en aprieto al sujeto pasivo, el tal Felipe. En cuanto a la proxémica el espacio personal y social ya viene determinado por la sala del juicio.
Pasamos a analizar macroexpresiones, microexpresiones y lenguaje verbal y no verbal que demostrarán que el sujeto pasivo no dice la verdad.
La imagen de la portada corresponde al segundo 30, es el inicio del interrogatorio, cuando la jueza le está haciendo una batería de preguntas al detenido. (Por cierto, me sorprende que la jueza haga varias preguntas seguidas, pues así da la oportunidad de responder a algunas de ellas. Yo como interrogador las habría hecho de una en una). Se puede observar al sujeto sentado, con las piernas abiertas, las palmas de las manos sobre las mismas elevando las manos de forma comedida con las palmas hacia abajo, el cuerpo en general con cierta rigidez troncal. Es muy sorprendente como se muerde o aprieta los labios constantemente (de esto hablaremos más adelante).
El análisis de esta primera imagen corresponde a su macro expresión corporal completa, refiriéndome sobre el sujeto de forma holística. Quiere mantener el control, por eso intenta no hacer movimientos ilustrativos y hace movimientos adaptadores. Los gestos adaptadores salen cuando queremos manejar las emociones.
Labios
Presionarse los labios constantemente es sin duda una señal de estrés, pero puede serlo también de frustración o desaprobación. Presionar los labios se hace cuando se intenta controlar las emociones y literalmente se puede llegar a morder los labios para evitar decir lo que realmente siente, lo cual le provoca estrés. Es una señal de estar reteniendo los sentimientos igual que morderse la lengua como hace en el minuto 0,45. Aquí es un claro gesto de contención y represión. El desvío de la mirada apretando los labios denota una emoción de vergüenza cuando mira hacia abajo, pero al mirar hacia arriba veo desprecio y altivez, una mirada superior. Al afinar los labios le sale la rabia que tiene en su interior.
En la imagen 4.03 hablaremos del movimiento de labios y boca con más detalle y de forma especifica.
Piernas y tronco
En la imagen el sujeto está tomando aire y se le altera la respiración, se mueve en su silla como una clara manifestación de que su cuerpo estaba en tensión por la mentira que tendría que explicar para responder a las preguntas que le estaba formulando la jueza. Cognitivamente hablando, estaba haciendo un esfuerzo.
La posición de las piernas, estando abiertas, denotan que no está cómodo en la situación y toma una posición de ataque. Denota agresividad latente, de espera atenta, dentro del binomio de ataque/huida.
El tronco lo mantiene recto, intentando no transmitir nada al mantener esta postura neutra pero no podrá mantener esta actitud con el resto de su cuerpo. A veces adelanta el tronco, poniendo así posición de ataque.
Movimiento de las manos
Como dice el temario «cuando la palma de la mano se dirige hacia abajo, indica una necesidad de dominar a su(s) interlocutor(es) o, por otro lado, el desprecio o la necesidad de no comunicar nada. Puede mostrar (si por ejemplo observamos que «hace fuerza») una total falta de confianza». Si las manos hubiesen estado hacia arriba «sería señal de calma y entrega».
La falta de expresividad en sus manos, estáticas y con las palmas hacia abajo, indican algún tipo de disimulo. Mueve las manos como gesto adaptador dejando estas descansar en su rodilla intentando controlar su estado emocional con este gesto. Intenta así controlar su estado emocional y ayudarse en estar concentrado.
Movimiento de labios. Imagen minuto 4:03
La siguiente imagen es una ampliación de esta, para ver más detalladamente el rostro.
1. La postura neutra de la cabeza, de manera general, denota una atención real hacia su interlocutor. A mayor extremidad de este gesto, mayor sumisión respecto a su interlocutor, pudiendo llegar a la total sumisión (sobre todo, en el ámbito judicial, por miedo).
2. Actividad frontal. Hay ciertas arrugas por la contracción de las cejas. En este caso las arrugas señalan miedo, temor, angustia.
3. Cejas bajas. Cejas bajas y contraídas, verticalidad de cejas y tensión. En este caso demuestran ira y tristeza.
4. Hay fruncimiento de la nariz aquí y varias veces, esto significa repulsión o disgusto intenso. Fruncir la nariz puede querer decir «Estoy disgustado», es un movimiento auto adaptador. Puede estar disgustado porqué no consiguen que le crean.
5. Labios. Boca. Las preguntas de jueza y fiscal hacen que el sujeto está enseñando los dientes, signo de agresividad. Podríamos incluso (como hemos estudiado) denotar cierta superioridad o desprecio. Tener la boca abierta y los labios tensos denotan también miedo.
Morderse labios, sacar lengua y hacer ráfaga de parpadeos
Momentos en los que junta labios sacando lengua: 0,45. 1,15. 1,37. 1,43. 1,49. 1,55. 2,0. 2,09. 2, 24. 2,41. 2,45. 3,09. 3,32. 3,42. 4,06. 4,18. 4,31. 4,40. 4,48. 5,12. 5,24.5,48. 6,0. 6,20. 6,43. 6,45. 6,56. 7,02. 7,38. 7,50. 7,55. 8,18. 8,43.
33 veces he podido contar al sujeto sacando la lengua y juntando los labios. Más veces los junta sin sacar la lengua, la suma sería superior. 33 microexpresiones que denotan que probablemente miente como veremos en la conclusión de este informe.
Esta imagen, del minuto 7,49 corresponde a una pregunta del fiscal «Usted comenzó su discurso diciendo que no mató a Tatiane, usted está acusado no solo de un delito de asesinato, sino también de fraude procesal y de retención ilegal, ¿Niega usted también estas otras acusaciones?» el acusado responde: “Guardo silencio”. Podría haber respondido sí, lo niego, o aceptar solo esos delitos de los cuales hay pruebas de video contra él muy claras, y negar el haber lanzado por el balcón a su mujer, pero aquí notamos que no ha podido construir en esos momentos una respuesta, y se ha negado a responder la verdad.
Mientras el sujeto escucha apenas parpadea, se está concentrando en construir la respuesta, haciendo un esfuerzo muy alto cognitivamente hablando. Finalmente decide no responder y guardar silencio, y lanza una ráfaga de no menos de 7 parpadeos rápidos. Ese parpadeo corresponde a una liberación, pues su subconsciente le dice…»ya puedes descansar, ya has acabado de mentir».
Varios estudios han demostrado que las tasas de parpadeo disminuyen con un aumento en la carga cognitiva (mientras se construye la mentira) seguido de un aumento compensatorio en los parpadeos inmediatamente después de la mentira, cuando la carga cognitiva ha disminuido, como le ocurre al sujeto Felipe. Otros estudios han dado el efecto contrario: la frecuencia de parpadeo aumenta mientras se dice una mentira.
Depende en que individuos, pero en todos los estudios hay un denominador común y es que hay una desviación de la frecuencia de parpadeo durante el proceso de decir una mentira.
Conclusión
En el minuto 0’36» aprieta los labios y toma aire, cambia su ritmo de respiración y se mueve sutilmente en su silla como una clara forma visible de que cognitivamente está haciendo un sobresfuerzo porqué va a tener que mentir, por lo que se dan varias señales a pesar de que sigue en una postura controlada con las manos hacia abajo apoyadas en su pierna.
Más o menos en el minuto 0’54 – Al afirmar: «Yo no maté a mi mujer no soy un asesino» vuelve a decir si (o sea, asiente) con la cabeza contradiciendo su discurso. Al mismo tiempo, su respiración es tan descontrolada que tiene que respirar entre frase y frase. Vuelve a hacer negaciones repetitivas como las palabras “nunca y nunca”, lo que también indica un potencial de disimulo.
Llama la atención a partir del minuto 1’00 cuando dice «Nunca le he quitado la vida a ningún ser vivo, nunca a ninguna persona, menos a una mujer, menos a mi esposa» . En el lenguaje verbal observo una negación exagerada cuando afirma que «nunca le he quitado la vida a ningún ser vivo». Luego crea una escala de valores, de prioridad (persona, mujer y esposa). Aquí se invierte la escala de prioridad de la respuesta, es decir, su esposa debe estar por delante de todos los demás. Luego dice: “mucho menos de una mujer, mucho menos de mi esposa”.
Minuto 1’09 – Dice la negación «Nunca» con su cuerpo asintiendo de forma positiva contradiciendo su discurso verbal: «Yo nunca he sido un asesino».
La jueza parece que se percató de que había preguntado mal al interrogado, además de darle la posibilidad de no contestar las preguntas varias veces, cambió su estrategia y dijo: «Ahora, si quieres complementar tu declaración, si quieres decir algo más, estabas hablando de la pericia, puedes denunciarlo». En la secuencia de la respuesta que viene después, el entrevistado nos presenta varias señales interesantes:
«Esto me gustaría decir una vez más. No soy un asesino. No maté a mi esposa. Soy inocente. Llevo ocho meses viviendo con esto. Es muy difícil ser masacrado por la prensa de una manera absolutamente injusta. Se me ha privado de mi libertad de forma absolutamente injusta, no soy un asesino, no maté a mi esposa, siempre he amado a mi esposa, sigo enamorado de ella, siempre he contado con la verdad».
Cuando dice «No soy un asesino, no maté a mi esposa» su cabeza asiente de nuevo de forma positiva en lugar de asentir de forma negativa. Contradicción entre lenguaje verbal y no verbal.
En otro extracto de su respuesta dijo: «No soy un asesino, no maté a mi esposa». Nuevamente asiente con la cabeza de manera positiva contradiciéndolo y se mueve ligeramente hacia los lados como un sentimiento de arrepentimiento por su acto. Es un discurso aprendido.
Cuando una persona es culpable, se observa que se hace más y más difícil para él hablar, esto se debe a que el sistema nervioso disminuye el flujo salival en momentos de estrés. Cognitivamente hablando hace un sobreesfuerzo. Otra cosa que hace el acusado es que repentinamente se muerde el labio. Cuando la gente miente, es común que rompan el contacto visual, pero el mentiroso podría hacer un esfuerzo adicional para mantenerlo. Aquí suele mirar a un lado. |
Mentir requiere de demanda cognitiva, se asocia una disminución de parpadeo seguido por un efecto compensatorio: El sujeto tiene un aumento de parpadeo de los ojos inmediatamente después de que se ha contado la mentira y ha cesado la demanda cognitiva. El sujeto miente y evade decir la verdad.
Fuentes:
comunicacion-no-verbal/
43.pdf
S:0fbb66ab-7de5-4fa0-87cd-c675fbc36d49
S:81a3115f-b114-482e-a5b8-d1bfd0fb44bd
COMUNICACION-E-INTERROGATORIO-
POLICIAL.2107078304349-1.pdf
S:a0efd141-b36a-46f7-816a-8e53217d98df
José Manuel López Viñuela – Perito Judicial Comunicación No Verbal Detección de Mentiras, Gestión y Dirección de Centros Educativos y Acoso Escolar. Gestión de Calidad: ISO 9001